Vista exterior monasterio de Rioseco

El Cister Ibérico

Un recorrido por los monasterios cistercienses de la península ibérica

Inicio / El Cister en Castilla / Castilla León / Burgos / Monasterio de Rioseco

Situación

Rioseco

Valle de Manzanedo

Villarcayo

Burgos

Filiación

Morimond / Berdones / Valbuena / Rioseco

Horario de Visitas

Se puede visitar todos los días sin visita guiada

Visitas guiadas

Junio todos los fines de semana

Julio del 1 -15 fines de semana

Del 15-30 todos los días

Agosto todos los días

Septiembre todos los fines de semana

Hasta el 13 de octubre fines de semana

TF 681 682 680

visitas@monasteriod erioseco.com

Propietario

Archidiócesis de Burgos

Estado de Conservación

Ruina

Obras

No

Comunidad religiosa

No

Culto

No

Restricciones Visitas

No

Pagina Web

Conectar

Otros servicios

No

Alrededores

Valle de Manzanedo

Iglesia Románica Crespo

Merindad de Valdivielso

Iglesia de San Pedro de Tejada

Villarcallo

Cabeza de partido

 

Monasterio de Santa María de Rioseco

El monasterio tiene como antecedentes otras localizaciones anteriores, en Quintanajuar y San Cipriano de Montes de Oca. En 1235 se localizará definitivamente en este emplazamiento en un alto junto al Ebro, como todos los monasterios del Cister, alejado de poblaciones y con acceso fácil al agua.

Es el rey Alfonso VII el que manifiesta su deseo de crear una comunidad o monasterio en la zona, y para ello realiza donaciones primero a diversos monjes eremitas de Quintanajuar pero parece claro que en ningún momento se llegaron a construir edificios mas allá de una ermita. La comunidad de monjes se traslada a San Cipriano, durante el reinado de Alfonso VIII, asentándose en 1184 y recibiendo donaciones de familias nobles como Diego Jiménez de Cameros, incluso recibiría la visita del rey Alfonso VIII en 1189. Durante la estancia cisterciense en este emplazamiento, se reciben constantes donaciones en zonas de Castilla la Vieja, lo que hace plantearse a la comunidad un nuevo traslado, además de la existencia de monasterios cistercienses cercanos como los de Herrera y Bujedo. No debió existir tampoco en esta localización edificio de importancia.

No existe constancia documental de si el monasterio es una fundación directa, en este caso el monje Cristobal, primer receptor de la donación real, provendría de Francia enviado por San Bernardo, cosa poco probable, o fue una fundación benedictina, que posteriormente se adscribiera a la observancia cisterciense, siendo una filiación de Valbuena, lo que es mucho mas probable, siendo la fecha mas aceptada para la filiación la de 1148 mientras estaban localizados en Quintanajuar, posteriormente se trasladan a San Cipriano de Monte de Oca donde permanecen hasta 1204, trasladándose al primer emplazamiento de Rioseco en 1204. (Bibliografía)

En el escondido valle de Manzanedo existía una tradición eremítica y religiosa, la existencia de cuevas e iglesias rupestres así lo confirman, además nuevas donaciones del rey como la granja de San Esteban de Tesla y la promesa de nuevas adjudicaciones si se produce el traslado a Rioseco, hacen que la comunidad decida su viaje definitivo a una zona, donada anteriormente por los hijos de Martín Martínez de Bisuejes al abad de Quintanajuar, de un monasterio denominado de Rioseco. Se produce un nuevo traslado que lleva a la comunidad a un asentamiento del que nada queda en la actualidad, excepto algunos restos del templo conventual, que se convirtio durante un tiempo en templo parroquial de Nuestra Señora de Parrales, en lo que podría ser un monasterio ocupado previamente por los benedictinos. Por fin se produce el traslado definitivo que tuvo lugar en 1216, tras sufrir una grave inundación, lo que explica la localización elevada del nuevo monasterio, quedando en adelante con la denominación de Santa María de Río Seco o de Riosequillo, donde se instalan definitivamente en 1236.

El monasterio sufre muchas situaciones complicadas en lo sucesivo, pero se mantiene habitado hasta 1809 en que se produce la primera exclaustración por las tropas francesas, durante la guerra de independencia. En 1814, la comunidad consigue recuperar los edificios y los bienes salvados por los vecinos de la rapiña francesa. En 1820 se produce la segunda exclaustración siendo subastados sus bienes en mayo de 1821. Dada la dificultad de la venta de un edificio tan costoso y de escasa utilidad, el monasterio quedaría sin vender, lo que explica que en 1823, fuera de nuevo ocupada por los monjes. La desamortización definitiva ocurrirá en 1835, setecientos años después de conformarse la primera comunidad monacal.

El monasterio está actualmente abandonado , en estado de ruina y expuesto al expolio de todos sus bienes. Solo se pueden adivinar los restos de la iglesia y parcialmente del claustro. El resto de las estancias son irreconocibles por su avanzado deterioro.

Desde la página web del monasterio se está llevando a cabo una recogida de firmas para aprobar la recuperación del monasterio y convertirlo en un parador de turismo. Desde aquí mi apoyo a la iniciativa a la que ya me he sumado, y animar a todo el que visite esta página a que se sume a la campaña en www.monasterioderioseco.com. Ánimo a los promotores de la idea y a ver si entre todos rescatamos de la ruina este precioso monasterio y su entorno.

Estos mismos voluntarios han llevado a cabo obras de limpieza y estabilización del monumento por lo que ha cambiado desde que lo visité

Plano monasyerio de Rioseco

 

 

La iglesia
El claustro