El Cister Ibérico

Un recorrido por los monasterios cistercienses de la península ibérica

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Situación

Santa Colomba de las Monjas

Zamora

Filiación

Gradefes

Moreruela

Horario de Visitas

Desaparecido

Propietario

-

Estado de Conservación

Desaparecido

Obras

-

Comunidad religiosa

Persiste en Benavente

Culto

-

Restricciones Visitas

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Pagina Web

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Otros servicios

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Alrededores

 

Monasterio de Santa Colomba de las Monjas

También conocido como monasterio de San Salvador o de San Bernardo, es un monasterio que ha tenido a lo largo de su historia en tres localizaciones diferentes, siendo el ínico monasterio femenino en tierras zamoranas.

La localización original ocurre en la localidad de Santa Colomba de las Monjas, existiendo noticias de su existencia desde 1097, si bien de este primitivo monasterio se cacere de documentación, desconociendo su naturaleza. Sobre este monasterio probablemente abandonado, se funda en 1181, el monasterio de San Salvador de las Dueñas, con donaciones de D. Rodrigo y D. Vasco Fernández nobles de Benavente, localidad a la que siempre estuvo unido el cenobio. La primera comunidad provenía del monasterio de Gradefes. Unos años después la abadesa Dª Juliana, acude al capítulo provincial de la Orden que se celebra en Burgos en 1189.

En la época en que el capítulo general de Cister decide que los monasterios femeninos dependerán de uno masculino, nuestro monasterio lo hace con el de Moreruela, con el que mantendrá una estrecha vinculación.

Juan II de Castilla concede privilegios en 1427 y 1428, defendiendo al monasterio en sus bienes y sus servidores.

En 1563 tras el concilio de Trento que decide que los monasterios femeninos no pueden estar en lugar apartado, se plantea el traslado del monasterio a una zona mas segura, planteándose dos alternativas, la de Villalpando, que se desecha por la falta de fondos del monasterio para construir un nuevo edificio, y la de Benavente, en la que los regidores ofrecen a la comunidad la cantidad de doscientos ducados para efectuar su traslado, de tal manera que en el mes de marzo de 1581 se suceden intensas negociaciones con el abad de Moreruela, y los regidores de Benavente, que designan a D. Hernando de Carbajal y D. Antonio de Salamanca para realizar los trámites y obtener los permisos del abad de Moreruela y los obispos de Astorga y Zamora, ademas de la propia comunidad de religiosas.

A partir de 1584 se acomete la edificación del nuevo monasterio en Benavente, en unos terrenos ocupados por huertos junto a la iglesia de Santa María de Renueva. Diversos donativos de la propia orden cisterciense, de particulares, y los doscientos ducados aportados por el ayuntamiento, además de otras aportaciones como la dote de una profesante perteneciente a la nobleza de Benavente Sor Luisa Vázquez de Hiebra, permiten llevar a buen fin las obras.

La comunidad solicita ante la falta de medios para erigir una iglesia, la posibilidad de que la comunidad pudiera utilizar la vecina iglesia de Santa María de Renuncio para celebrar los oficios y la misa en ella, disponiendo las religiosas de coro alto y de capilla cerrada con una reja.

Finalmente en 1585 se produce el traslado de la comunidad, provisionalmente en el Hospital dela Piedad, hasta la finalización de las obras, lo que ocurre en 1590 , celebrándose gran fiesta para la inauguración del nuevo monasterio.

El monasterio construido con fábrica humilde pero bien realizada, permanece hasta la ocupación francesa. El 31 de diciembre de 1808, las monjas tienen que huir del monasterio, como la mayor parte de los vecinos. En octubre de 1809, varias monjas de la comunidad comienzan a reunirse en una vivienda cedida por un vecino de la villa, bajo la autoridad de la abadesa sor Escolástica Antonia Argüello, poco a poco acudirán otras monjas, que comenzaron a recuperar el monasterio que había quedado en situación de ruina. Se comienza la reconstrucción en 1814 y el 26 de mayo de 1816 se reintegra la comunidad.

Con la exclaustración de 1835, la comunidad no se dispersa, pero en 1868 se produce la exclaustración durante un tiempo, pudiendo volver, con la condición de dedicarse a la enseñanza, para evitar la exclaustración y como medio de ayuda al sostenimiento de la comunidad.

En 1970 se detecta que todo el maderamen del convento ha sido invadido por las termitas, por lo que al carecer de medios para solucionarlo, se decide la venta del solar y la construcción de un nuevo edificio en las afueras de la ciudad, y el 30 de noviembre de 1976 se produce el nuevo traslado, donde permanecen hasta la actualidad. (Bibliografía)