El Cister Ibérico

En la ladera del monte Suspiazo, en la parte norte del lago de Sanabria se encuentra este monasterio, cuyas raíces se adentran hasta la época visigótica.

La fundación del monasterio, se ha datado gracias a una inscripción epigráfica que se conserva en el renovado hastial de la iglesia del monasterio. Refiere que la iglesia de San Martín permaneció en ruinas hasta que el abad Juan y sus monjes procedentes de Córdoba , levantaron allí su monasterio, siendo rey Ordoño II. En esta inscripción se ofrece una fecha "Era nobi et s. centena nona" que ha dado lugar a diferentes interpretaciones, pareciendo que la de 921 es la mas aceptada por los expertos, apoyándose en documentos como el que reconoce a un abad Juan al frente del monasterio en el 927. En otro documento posterior de 952, los monjes afirman que procedentes de Mouzoute, disfrutan de las pesquerías del lago, por haberlas comprado su abad Martín treinta y seis años antes.

La existencia de documentos sobre un pleito, entre los monjes del monasterio y los habitantes del lugar, sobre la propiedad de una pesquería situada en el río Tera a la salida del lago, explicaría la confusión, estableciendo que el tal Martín sería un monje que recibió los bienes por parte del monasterio, adjudicados en la sentencia del juicio. En 952 se produce un nuevo conflicto sobre la titularidad de la pesquería, en este caso por el intento de usurpación de otro monasterio y su abad Román que se ha identificado como perteneciente al monasterio de San Juan Bautista en el otro extremo del lago. En este pleito es el propio rey Ordoño III, el que intervendrá adjudicando la pesquería y las tierras de ambas riberas al monasterio de Castañeda.

La comunidad mozárabe comienza a edificar su monasterio, recibiendo pronto el favor regio mediante donaciones como la villa de Vigo con su término en 940. La absorción de Castañeda de otros centros monásticos de la zona como el monasterio de Intranio, obligada por el obispo de Astorga, Salomón, debido a la situación económica del monasterio integrado.

El monasterio aumenta sus propiedades mediante donaciones, como la del presbítero Juan, de la villa de Asurvial con la iglesia de San Ciprián, que había sido monasterio, o mediante adquisiciones como la de la villa de Coso, vendida por el abad del monasterio de San Martín de Valllispopuli, en 960, así como dos molinos,, uno donado por Virio y Adosinda en el río Trefacio (965) y el segundo comprado por el monasterio, en el mismo río.

A partir del primer tercio del siglo XI se produce un silencio documental sobre el monasterio hasta que a mediados del siglo XII. Alfonso VI entrega el monasterio a un monje de Carracedo, confirmando así mismo el privilegio que establece los límites del coto redondo del monasterio (Bibliografía).

El monasterio mozárabe debió desaparecer por la dura crisis de finales del siglo X, siendo sustituido por el tardo románico en el siglo XII

En 1150, Alfonso VII envía un monje del monasterio de Carracedo, Pedro Cristiano para que se haga cargo del lugar de Castañeda, siendo hombre cercano al monarca, que recibe numerosas donaciones que revitalizan la economía del monasterio, lo que permite acometer la construcción de la nueva iglesia. Pedro Cristiano será nombrado obispo de Astorga lo que favorecerá la atención a su antiguo destino, que tendrá un nuevo abad procedente de Carracedo, Martín.

Como ya se ha mencionado en la página dedicada al gran monasterio berciano, se produce una tardía filiación de este al Cister, en la que le acompañarán todos los monasterios de el dependientes, entre ellos Castañeda, no siendo hasta 1245, cuando los monjes blancos comandados por el abad Viviano, tomen posesión del monasterio sanabrés.

El monasterio en los siguientes siglos sufre las lacras de los abades comendatarios y la pérdida de influencia de la orden cisterciense dentro de la iglesia y en la sociedad en general, debido al traslado del poder a las ciudades, hasta la llegada de la reforma de la Congregación Cisterciense de Castilla, bajo el impulso de Fray Martín de Vargas, a la que se une nuestro monasterio en 1540, lo que conllevará transformaciones en la fábrica monacal, y una bonanza en lo económico. De esta época es la fachada occidental de la iglesia y el claustro que sustituiría al primitivo medieval y del que hoy quedan pocos restos y la sala capitular.

Es en el siglo XVIII cuando se produce otro gran movimiento de reforma del monasterio, con la decoración y remate de la espadaña, la puerta de la iglesia recibe una nueva modificación, la entrada actual al recinto de época de Carlos III.

La desamortización, produce el abandono del edificio y su deconstrucción, hasta los años 40 del siglo XX. En 1931 es declarado Monumento Histórico-Artístico, siendo restaurado a partir de 1946 con criterios que trastocaron seriamente el aspecto externo e interno del monumento.

Recientemente se ha recuperado el espacio del viejo monasterio barroco, cubriéndolo y dividiéndolo en en plantas por medio e bóvedas de crucería de madera laminada, utilizándose en el momento de la visita como un museo y centro de interpretación del monasterio.

Plano obtenido de Bibliografía

1. Iglesia

2. Sala capitular

3. Edificio barroco